Curiosa forma de ver las cosas … realmente ¿se puede disfrutar con las desgracias ajenas?. Sinceramente … creo que nuestro mundo es «demasiado pequeño» como para ir «haciendo amigos» y/o dejando un pufo detrás de otro. Pero parece ser que esa es la tónica habitual de las Cárnicas.
Hace un rato charlaba con un amiguete (si, martes festivo a la 1 de la madrugada … que le vamos a hacer, ahora es mi horario). La conversación derivaba en lo malos que son los de la cárnica A en comparación con los de la cárnica B.
Es una discusión recurrente en los últimos años, todos conocemos gente que ha trabajado en alguna de las susodichas cárnicas y hasta el día de hoy, nunca he encontrado a nadie que diga o que cuente que algún proyecto haya salido ni mínimamente bien.
Y aun así … ahí les tienes … en todo lo alto del ranking. ¿Que la cagan en un sitio?. No pasa nada, mañana se van al de al lado que, aun a sabiendas de que son de lo peor les siguen dando la pasta. Y así hasta el infinito y mas allá.
Supongo que siempre será mejor ser una vaquita que un pobre becario aguantando a un pelacebollas (la descripción no es mía, la leí y me hizo tanta gracia que la añadí a mi bolsa).
En fin, es muy tarde… aun me queda un rato … la herramienta de monitorización tiene un color mas que saludable y con un poco de suerte esta noche me dejaran dormir del tirón (si, además de estar currando un día festivo estoy de guardia).
Volvamos a lo de las desgracias ajenas … debo de ser un tío raro, porque siempre que me he ido de algún sitio acabo solucionando problemas que ya no son mios. Siempre he tenido un problema a la hora de decir que no … total si no me cuesta nada … y hasta es posible que el Karma algún día me recompense (por desgracia esto aun no ha sucedido).
Lo curioso del caso (y supongo que cosas del Karma) es que cuando soy yo el que necesita la ayuda … no siempre la obtengo. A veces el Alzheimer llega antes de lo previsto.
Justamente hace un rato pensaba en «la gran mierda» que me había quitado de encima, otro gran ejemplo de lo que es una bola de mierda que se va haciendo cada vez mas grande por estar gestionada por unos incompetentes de libro. Incompetentes que en vez de aprender de sus errores llaman a sus amigos incompetentes para intentar parar la bola … mas incompetentes … mas bola. Es una combinación peligrosa. Incompetentes + carnicas. Pero no … no pienso reírme de las desgracias ajenas.
Viendo la hora que es … un ultimo vistazo al correo, otro vistazo a la monitorización … y se acabó otro día. Sin gritos, sin malos rollos, sin tonterías.